La sudoración excesiva en el trabajo es un verdadero fastidio. Es incómoda, puede ser antiestética y, a menudo, incomoda a quienes la padecen. Desafortunadamente, la sudoración excesiva puede tener un impacto negativo en la carrera profesional, tanto directa como indirectamente. Sus efectos en el trabajo pueden ser de gran alcance. Este artículo analizará el efecto dominó de la sudoración excesiva y ofrecerá consejos prácticos para prevenirla.
Cómo la sudoración excesiva puede afectar la productividad
En un día cualquiera en el trabajo, probablemente tengas una larga lista de cosas por hacer. Si trabajas en una oficina, tienes correos electrónicos que responder, llamadas que hacer, reuniones que asistir, informes que crear o clientes que conocer. Todas estas tareas requieren mucha concentración y tiempo.
Intentar disimular la sudoración excesiva también requiere mucha concentración, además de tiempo y energía. ¿Quién no dedicaría al menos un poco de atención a disimular el sudor? El problema, sin embargo, es que disimular el sudor excesivo se vuelve demasiado laborioso.
Pierdes la concentración en lo importante. La sensación de sudoración también puede crear una experiencia física desagradable que exige atención y alivio, lo que agrava aún más tu dificultad para concentrarte.
La sudoración excesiva también puede reducir la capacidad para realizar tareas que requieren destreza manual y motricidad fina. El sudor en las palmas de las manos puede dificultar el agarre de herramientas o engranajes necesarios para operar maquinaria pesada e incluso comprometer la seguridad.
Conclusión: Reducir la sudoración suele ser suficiente para ayudarte a centrarte en lo importante. Aunque no desaparezca por completo, podrás trabajar cuando no estés preocupado por mantenerte seco.
Cómo la sudoración excesiva afecta tu percepción de ti mismo
La hiperconciencia del sudor excesivo contribuye a una baja autoestima. Con una baja autoestima, es más probable que te reprimas y te consideres un "defecto". Esto genera una sensación de aislamiento.
Puedes asumir que te observan o escudriñan, lo que perpetúa aún más el ciclo de baja autoestima, independientemente de si tus suposiciones son ciertas o no. El resultado inevitable de esto es un aumento del estrés e incluso la ansiedad. Para algunos, estas emociones negativas alimentan la depresión.
Conclusión: Cuando controlas la sudoración, prestas menos atención a los sentimientos negativos sobre ti mismo. Tu autoestima se mantiene intacta.
Cómo la sudoración excesiva afecta las habilidades sociales en el trabajo
Una de las mayores repercusiones de la hiperhidrosis no controlada son las repercusiones sociales negativas. Existe la tendencia a evitar situaciones sociales donde la sudoración excesiva pueda manifestarse para protegerse.
Piense en intercambios sociales sencillos, ampliamente practicados antes de la pandemia de COVID-19, como los apretones de manos. Estos eran gestos insoportables para una persona con sudoración excesiva. Quien sufre de hiperhidrosis no quiere estrechar la mano de alguien que pueda exponerlo como el empleado con las palmas sudorosas. Si alguien tiene que lidiar con la sudoración excesiva en el trabajo, es posible que evite estas interacciones por completo.
La sudoración excesiva también puede representar un desafío al tratar con clientes. Una apariencia sudorosa puede dar al cliente la impresión de que el trabajador tiene mala higiene, aunque esto sea completamente falso.
La acumulación de retroalimentación social negativa puede llevar a una persona a aislarse, lo que le genera etiquetas como «antisocial», «distante» o «distante». Estas etiquetas solo traumatizan al empleado y reducen aún más su rendimiento laboral.
Conclusión: Reducir la sudoración excesiva es un paso importante para recuperar la confianza social. Cuando ni tú ni los demás notáis la sudoración excesiva, no tenéis por qué sentiros cohibidos al interactuar con los demás.
Cómo afecta la sudoración excesiva a los ascensos laborales
Un ascenso laboral generalmente se presenta cuando un empleado ha demostrado una productividad y confianza excepcionales y ha demostrado ser un jugador de equipo.
Con la sudoración excesiva, los empleados pueden tener un historial laboral mediocre en todas las áreas. Es difícil ser productivo cuando dedicas tanto tiempo a intentar ocultar la sudoración excesiva. Es difícil confiar en ti mismo cuando sientes que los demás te juzgan por lucir demasiado sudoroso. Es difícil ser sociable cuando tienes que evitar interacciones comunes que te incomodan a ti o a los demás. Todos estos comportamientos, comprensibles para alguien con hiperhidrosis, dificultan mucho las posibilidades de ascenso.
Conclusión: Reducir el sudor excesivo te permite recuperar tu productividad, tu confianza y tu deseo de construir relaciones sólidas en el trabajo. Al experimentar estas mejoras, tendrás mayores posibilidades de ser seleccionado para un ascenso cuando surja la oportunidad.
Cómo afecta la sudoración excesiva a tu bienestar psicológico
Nuestros trabajos desempeñan un papel importante en la formación de nuestra identidad. Cuando la sudoración excesiva impide un buen desempeño laboral, es probable que nos sintamos como impostores . La infelicidad y la improductividad aumentan el estrés, la ansiedad y el riesgo de sufrir otros problemas de salud mental. El resultado es una mala salud mental que solo empeora el rendimiento laboral y crea un círculo vicioso.
Conclusión: Tu trabajo afecta tu salud mental, y tu salud mental afecta a tu trabajo. Al eliminar la sudoración excesiva, puedes desempeñarte y concentrarte en tu trabajo con mayor pasión. Con un mayor rendimiento y experiencia laboral, puedes disfrutar de los frutos de tu trabajo, así como de relaciones laborales saludables, lo que promueve una mejor salud psicológica.
Recuperando tu verdadero yo a pesar del sudor excesivo
Notarás que para cada uno de los cinco puntos que hemos enumerado anteriormente hay una conclusión que enfatiza la importancia de controlar la sudoración excesiva por el bien de tu carrera.
Quizás no puedas eliminar por completo la sudoración excesiva. Sin embargo, puedes reducirla hasta el punto de que sea prácticamente imperceptible para ti y para los demás. Para muchos empleados, reducirla a un nivel prácticamente imperceptible es suficiente para sentirse cómodos y en control en el trabajo. ¿Cómo puedes lograrlo?
Identifica tus desencadenantes
Practica la atención plena para identificar cuándo sudas más y qué puede intensificarla. Ten paciencia y recuerda que los desencadenantes pueden no ser obvios ni fáciles de identificar. Dicho esto, los desencadenantes comunes del sudor excesivo incluyen:
- Alimentos grasosos
- Cafeína
- Alcohol
- Cigarrillos
- Medicamentos recetados y recreativos
- Ansiedad/Situaciones estresantes
Realice cambios de estilo de vida bien informados
Si nota un patrón o lo que parece ser un desencadenante, anótelo y haga todo lo posible por evitarlo. Siempre aborde lo básico: lleve una dieta nutritiva, haga suficiente ejercicio, duerma lo suficiente y controle el estrés. Siga las recomendaciones de su médico sobre medicamentos y tratamientos, algunos de los cuales pueden incluir:
- antitranspirantes
- Botox
- Simpatectomía torácica endoscópica
- Iontoforesis
- Medicamentos
- Cambios en la dieta
Incorporar tejidos resistentes al sudor
Tenga en cuenta que la elección de su ropa influye enormemente en cómo percibe el exceso de sudor y en cuánto se nota. La ropa resistente al sudor para entornos profesionales puede ser muy efectiva. Puede ayudarle a sentirse más cómodo y, al mismo tiempo, disimular la apariencia del sudor excesivo. La ropa resistente al sudor suele ser una prenda interior que actúa como protección contra los signos visibles de sudoración. La ropa resistente al sudor de Neat Apparel contiene:
- Tejido que se activa con el sudor y evita que la humedad escape de la camiseta.
- Construcción de tela tipo laberinto que difunde el sudor para que no permanezca ni cause molestias.
- Capacidad de absorción de humedad que permite que el pantalón permanezca seco.
Un protocolo resistente al sudor para una vida laboral sin sudor
Si la sudoración excesiva te impide prosperar en el trabajo, es hora de que recuperes el control. Puede parecer difícil cuando parece no tener causa alguna. Afortunadamente, puedes reducir la hiperhidrosis haciendo algunos cambios en tu estilo de vida, siendo consciente de tus desencadenantes y usando ropa resistente al sudor. Mientras puedas concentrarte en tu trabajo, el sudor no tendrá poder sobre ti.